‹ Volver a los resultados
SUMMA > Biblioteca Digital > Revistas UPSA > Salmanticensis > 1998, volumen 45, n.º 1 > Páginas 55-103. Soledad y compañía de Jesús
Soledad y compañía de Jesús
González de Cardedal, Olegario
ESTUDIOS Salmanticensis 45 (1998) 55-103 SOLEDAD Y COMPANIA DE JESUS La existencia personal de Jesús está determinada por su condición divina y por su destino en una historia humana de finitud y violencia. Su misión salvifica ha estado circundada por Ia soledad. Aquí se analizan las diez formas de soledad que han determinado su trayectoria concreta. Pero junto a Ia soledad ha tenido el acompañamiento de los hombres y Ia perenne compañía del Padre. «Yo no estoy nunca solo». Soledad y compañía forman los dos polos de Ia vida personal de Jesús. Quien más soledad ha soportado es quien más compañía suscita y recibe. Nadie ha suscitado y recibido tanta compañía como Jesús. La Iglesia vive de Ia compañía de Jesús, ofrece esa divina compañía a. los hombres y así desaloja Ia soledad mortal del mundo, introduciendo a cada hombre en Ia comunión divina indestructible. Eso son Ia redención y deificación del hombre. I. LA SOLEDAD Y LA MISIÓN DE jESÚS La figura de Jesús está perfectamente definida y enclavada en el medio en que nace; sin embargo, es absolutamente indefinible y no se deja entender desde los esquemas o esperanzas del lugar y tiempo en que surge '. El está en este mundo realmente pero viene de otro y pertenece a otro. Esta trasmundanidad, subrayada 1 Estas páginas prolongan mi reflexión anterior sobre Ia soledad en general («Soledumbre, soledad, solitud», en: Raíz de Ia esperanza, Salamanca 1995, pp. 149-182) y sobre Ia soledad de Jesús («La soledad del hombre y Ia soledad de Cristo», en: Coram Deo. Memorial Juan Luis Ruiz de Ia Peña, Salamanca 1997, pp. 263-292).
https://doi.org/10.36576/summa.7603
PDF
49
x
3,3 MiB (3.451.327 bytes)
/ / : :