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«FRANCISCO SUAREZ EN LA INVESTIGACIÓN ACTUAL...»
Entre tos fechas 26-27-Xl-1979 se ceUbró en Za Universidad Pontificia de Salamanca un Simposio, dedicado a Suárez, en torno al titulo que precede. En él tomaron parte conocidos especialistas con el intento de establecer un «balance» del estado actual de los estudios suarecianos y abrir ¡*perspectivas» a fas investigaciones del futuro. En Zos páginas que siguen se recogen Zas ponencias desarrolladas en Zas sesiones. En ellas se intenta presentar kt obra del Doctor Eximio a nueva luz crítica; Io que se hace en el que creemos es momento oportuno: Cuando se están renovando los modos de ver nuestra historia y cultura pasadas, y cuando van en aumento los estudios tendientes a valorar con nuevos criterios y con conocimiento de causa ese pasado. Esta obra de revisión, con carácter rehabtlitador. afecta de modo particular a los tiempos del barroco. La parda óptica del neoclasicismo presentó a ese periodo como Za expresión misma del mal gusto, denigrándolo a pZacer. Ese juicio tópico se convirtió en dogma para los dos últimos siglos. En su libro «La cultura del Barroco» ha mostrado Maravall ¿a gratuidad de semejante tópico. Atribuye al vocablo *barroco» el significado de *concepto de época», que cubre una magnífica unidad de realizaciones y valores de cultura. Mostrando, por otra parte, cómo el espíritu que anima a esa unidad expresa *ingredientes constantes del genio español». La época del *barroco» viene a coincidir con el siglo XVIl, siglo que marca los tiempos de participación más activa de España en Ia vida europea. U. A. MaravaU, La cultura del barroco, Barcelona 1975, pp. 33^1, 49). A ese siglo, o mirando hacia él, pertenece Ia obra de Suárez, que puede ser considerado como exponente *eximio» de Ia cultura de Ia época en el campo del pensamiento. También Ia obra de Suárez ha de ser rehabilitada, viéndoki como aspecto de Ia cultura del tiempo, muy digna de él por sucalidad, su hondura, su rigor y su amplitud, índice mayor del pensar barroco, entró a participar, como ningún otro autor escolar, en ia empresa de activa configuración por parte de España de Ia vida europea, en este caso desde las academias y universidades. Con Io que no se trata de decir que haya de ser rehabilitado Suárez para convertirle en el filósofo de nuestra hora. No se intenta hacer proselitismo suareciano. Si decir que, sin Suárez, no se entiende debidamente Za historia de Ia filosofía de los tiempos barrocos (siglo XVH y parte del XVIII). De acuerdo con Zubiri, Suárez es el primero desde Aristóteles que realiza el «ensayo de hacer de Ia metafísica un cuerpo de doctrina filosófica independiente». Julián Marías, que recoge esa afirmación zubiriana, ve en Suárez *el único gran filósofo escolástico después de Ocham». Y sostiene que *Suárez es un filósofo con realidad y eficacia, incluido en Ia historia efectiva de Za filosofía, que ha actuado más de Io que se suele creer en el pensamiento de Ia época moderna» (Historia de 2a fitosofia, Madrid 1970, p. 199). En su época sabían muy bien
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