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EXPLICACIÓN CIENTÍFICA Y BIOLOGIA Insuficiencias de Ia Metodología hartmanniana ante el problema de Ia vida
De entre los problemas filosóficos «clásicos», muy pocos han resurgido con Ia pujanza del viejo problema de Ia finalidad. De nuevo, se habla del mecanicismo y de Ia problemática que una cosmovisión de este tipo implica. Y si durante algún tiempo pudo creerse que Ia cuestión podía considerarse como fósil y que su único interés era de tipo histórico, ciertas publicaciones recientes y su musitado eco, han demostrado su creciente y renovada vigencia !. Si Ia problemática de Ia finalidad está sometida a periódicos y virulentos «rebrotes», es porque pocas cuestiones tienen una repercusión tan amplia en todos los campos, incluso en el referente al de Ia conducta humana. Por eso falta con frecuencia, en quienes se ocupan de este problema, Ia serenidad y objetividad que deberían presuponerse en todo investigador. Es muy difícil mantener una postura aséptica cuando Io que está en juego no es solamente el problema científico del cómo del acontecer natural, sino toda una cosmovisión con todo Io que ella implica. Ya desde los tiempos de Galileo ha querido hacerse de las leyes de Ia Física el paradigma de toda explicación científica y han querido organizarse según este modelo casi todos los ámbitos del conocer humano. La Biología, en concreto, ha tratado de imitar en sus explicaciones todo cuanto podía a Ia Física. El objeto de este breve estudio es mostrar, cómo un tratamiento metodológico inadecuado de determinados problemas puede conducir a callejones sin salida. La aplicación unívoca e indiscriminada de determinados modelos a toda clase de problemas conduce, inevitablemente, a parcialidades y a falseamientos de las auténticas dimensiones de algunos de ellos. Esta postura se proclama, además, liberada de todo prejuicio o pretensión metafísica. Mi intención es mostrar que, en el fondo de tales posturas, subyacen y son operantes toda una serie de principios, tan metafísicos como poco confesados. No trato, pues, de indicar una nueva metodología para el estudio del viviente, sino de mostrar las insuficiencias de ciertos puntos de partida. El primer paso para formular un método mejor, es el estar convencido de su insuficiencia. Como punto de partida de esta discusión he tomado los escritos de Nikolai Hartmann. No porque en este punto
1 Baste citara este respecto Ia obra de J. Monod, Le hasard et to nécessité (Paris (Seuil) 1970). O Ia colección de estudios publicada recientemente en un número monográfico de Investigación y Ciencia 26 (1978).
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