|
LAS "CONDICIONES" DE LA HISTORIA DE LA FILOSOFIA 1. El sentido de Ia historia y Ia ftlosofía. La historia es, ante todo, una dimensión del hombre en su "estado" actual. Aunque Io que pudiéramos llamar, de un modo aproximado y relativo, Ia "naturaleza" del hombre, haya permanecido inalterable en Io fundamental, cuando nosotros nos referimos al "hombre" pensamos consciente o inconscientemente en el hombre que vive hoy, más aún, en el hombre que somos, nos sentimos y nos conocemos cada uno de nosotros. Y aunque hablamos del "hombre" de Pekín o de Java, o bien cometemos un error "antropológico" al asimilar a esos homínidos con el "estado" actual del hombre, o bien empleamos el término "hombre" en un vago sentido analógico. Lo que caracteriza a este ser que reconocemos como "hombre" es precisamente su sentido histórico; y desde este punto de vista puede decirse que Ia conciencia de Ia existencia del hombre va unida al nacimiento y constitución progresiva de Ia conciencia de Ia historia. Esta conciencia no brotó de golpe, sino que se ha ido cobrando a través de un largo recorrido también histórico. Y una etapa precisamente esencial de Ia constitución de Ia conciencia histórica, está representada por el nacimiento de Ia vocación filosófica. Así pues, Ia filosofía ha tenido historia desde el momento mismo en que el hombre tuvo conciencia de Ia índole propia del saber filosófico, o sea, desde el círculo socrático. Esto no quiere decir que no hubiese "historia", ni "pensamiento sapiencial" antes de Sócrates, ni fuera del mundo clásico y occidental helenizado, o heredero de Io griego, sino tan sólo reconocer el hecho del descubrimiento de una forma sw generis del saber: Ia filosofía. Este hallazgo tiene una doble matización histórica; una extrínseca: el nacimiento previo de Ia "historia" como un tipo aparte del saber; otra intrínseca: Ia comezón histórica, por llamarla de algún modo, de Sócrates y su círculo. El arraigo de Sócrates a Ia ciudad de Atenas, las deformaciones históricas que Platón hace de los pre-socráticos y Ia pequeña "historia de Ia filosofía" que hace Aristóteles en el libro A de Ia Metafísica justifican sobradamente esta afirmación. 2. Historicidad extrínseca e intrínseca de Ia filosofía. Además, el último elemento recordado nos plantea una segunda manifestación de Ia historicidad de Ia filosofía: Ia filosofía ha tenido y tiene una manifestación literaria "escrita", si así se Ia quiere llamar, que ha ido constituyéndose desde esos jugosos capítulos del libro A de Ia Metafísica de Aristóteles a nuestros días, pasando por los doxógrafos, San Agustín, Condorcet, Hegel, Comte, Dilthey y Ortega, por citar algunos nombres. Pero esta manifestación "literaria" de Ia filosofía no es identificable en absoluto con Ia "historia de Ia filosofía" en cuanto tal, pues este segundo concepto es mucho más amplio
|