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PROBLEMAS DEL MATRIMONIO AFRICANO *
Este epígrafe nos pone en las manos un hermoso libro, fruto de un estudio bien preparado, de Marcel Hauben. En su exposición, el autor ha dividido la obra en tres partes. En la primera, precedida de una mesurada y sobria introducción y una riquísima bibliografía, trata de la que acertadamente llama "la Problemática de la dote y de la paga del matrimonio africano. En cuatro capítulos analiza sucinta e históricamente la actitud oficial de la Iglesia congoleña Leopoldville— en materia de dote, y describe etnográficamente la dote africana como paga del matrimonio, presentándola como un fenómeno social, y la problemática del matrimonio africano y su paga a nivel de estructura social, poniendo al par de relieve los conceptos tradicionales del matrimonio cristiano, así como el matrimonio africano y su paga frente a las concepciones tradicionales del matrimonio cristiano. En la segunda parte, dividida en cinco capítulos, Marcel trata de estudiar la esencia del matrimonio cristiano y las estructuras sociales africanas en las que el mensaje cristiano debe encarnarse. El autor nos ofrece un documentado y minucioso estudio del matrimonio en el A. T., en el judaísmo tardío y en el mundo greco-romano, para, finalmente, poder ver cómo el mensaje de la Revelación se ha ido encarnando en estas estructuras judías y helenísticas. Marcel nos ofrece una rigurosa exégesis de los textos fundamentales de la tradición sinóptica y de S. Pablo, con vistas a una proyección de adaptación pastoral del cristianismo a las estructuras africanas, analógicamente a las adaptaciones de la Iglesia primitiva a las condiciones sociales de aquel tiempo. El Génesis considera el matrimonio en su aspecto puramente material, como una realidad terrestre creada por Dios; la unión de marido y mujer "en una sola carne" es una realidad brotada de las manos de Dios creador. Aquí aparece el matrimonio como una unión profunda, armoniosa e indisoluble entre dos personas de sexo opuesto, de dignidad y de naturaleza iguales. Esta unión monógama está penetrada por el amor, cuyo fruto es la fecundidad. Sin embargo, este orden establecido por Dios se destruye por el pecado, rompiéndose esta armonía preestablecida y entrando inmediatamente en escena la poligamia, el adulterio y el repudio. No obstante, siempre queda en Israel un resto que perpetúa, a lo largo de la Historia salvífica, la sacralidad de esta institución divina, revistiéndola,
* MARCEL HAUBEN, C.i,C.M. Contribution a la solution pastorale de la problematique d'u mariage africain et de son paiement. Roma, Herder, 1966, 200 pp.
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