|
Los samaritanos: pasado y presente
El 'buen samaritano' mencionado en Lc 10,25-27 ha llegado a ser un concepto en dondequiera que el Nuevo Testamento ha arraigado en Ia cultura local. Muchas personas también están familiarizadas con Ia historia de Ia 'mujer samaritana' en Sicar, que desempeña importante papel en una de las tradiciones del Nuevo Testamento acerca de Jesús (Jn 4,1-42). Sin embargo, no todos advertirán que no son meras figuras literarias, sino que de hecho representan un específico grupo de antiguos israelitas que ostentan una larga historia como nación y que han pervivido como comunidad religiosa hasta nuestros días. En tiempos recientes los samaritanos atraen de nuevo el interés de quien sigue su desarrollo en el Oriente próximo. Aunque Ia comunidad samaritana es reducida se ha concedido un desproporcionado espacio, tanto en publicaciones populares como en disquisiciones académicas, para dar cuenta de su historia y teología, de su lengua y liturgia. Antes de Ia guerra de los Seis Días, en 1967, Ia comunidad estaba dividida en dos sectores con poca comunicación entre ambos. El grupo más antiguo e históricamente más importante vivía, y continúa viviendo, en Ia ciudad de Nablus, que es Ia pronunciación árabe del nombre latino 'Neapolis', cerca de Sikem, en el valle situado entre los montes gemelos de Ebal y Gerizim. El número de miembros de esta comunidad es aproximadamente de 260 almas. El otro grupo, con casi 200 miembros, vive en Holón, al Sur de Tel-Aviv, en un lugar especial llamado en hebreo 'moderno Sikún ha-Somronim. Los 460 componentes de estos dos grupos constituyen sin duda Ia minoría étnica más importante en el mundo moderno. Sólo por este hecho habría aumentado el interés de antropólogos, sociólogos y de-
|