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FAM 16 (1997) 119-129
RECENSIONES
Recensiones
Lacroix, Xabier (1996), Les mirages 285 pp.
de l'amour, París, Centurión,
El autor, conocido especialista en temas de filosofía y teología del matrimonio, nos ofrece en este libro sobre «Los espejismos del amor» un excelente estudio acerca del amor y sus diversas interpretaciones, desde los mitos del amor, la antropología y psicología, la filosofía y teología. Reconoce desde el principio la dialéctica y el misterio que acompaña siempre a la realidad del amor, teñido de sufrimiento y cargado de ambivalencia, y, sin embargo, objeto de deseo e ideal de vida. No hay cultura que haya valorado más que la nuestra el amor y la nebulosa de significaciones que gravitan alrededor de este término (p. 8). Si durante mucho tiempo el matrimonio y la familia encontraban su justificación en las funciones sociales que debía cumplir, hoy toda la realidad matrimonial se tiende a justificar desde el amor, lo que implica también grandes riesgos. Nunca se ha valorado tanto el amor como hoy, y, sin embargo, nunca han existido tantos solitarios y desencantados del amor Pero si vivir es amar, y amar es vivir, será necesario afrontar desde el amor el vacío que produce nuestra cultura, la irreductible solitud del acto mismo de existir (pp. 13-14). De este modo, situando el tema en el mismo drama de la relación intersubjetiva y matrimonial-familiar, desde los planteamientos de las diversas ciencias (sociología, psicología, antropología, filosofía, teología), Lacroix concreta que el objetivo de su estudio Les mirages de l'amour no trata de ser una crítica racionalista a las «ilusiones del amor», sino más bien ima profundización en estas dos grandes afirmaciones: «el amor tiene siempre razón» (Vladimir Jankélévitch), y «al final de la vida se nos examinará del amor» (San Juan de la Cruz) (p. 19). Con este propósito, el autor estructura su obra de la siguiente forma: En el cap. I, «El reino de los mitos» (pp. 23-76), expone las representaciones míticas más importantes y corrientes del amor, destacando los aspectos más positivos o negativos que en estas representaciones descubre (mito andrógino, mito de Narciso y Pigmalión, mito de Tristán, de Don Juan...). El cap. II, «Los nombres del amor» (pp. 77-108), lo dedica a explicar los que cree son los nombres más significativos para expresar el amor: ternura, afecto, amistad, pasión..., con atinadas y precisas explicaciones sobre los aspectos que tales nombres más resaltan. El cap. III, «Elogio de la amistad» (pp. 109136), expone los valores e interpretaciones de una de las experiencias más bellas de la vida, destacando el fino análisis que el autor hace de los distintos aspectos. En el cap. IV, «Elogio de la solitud» (pp. 137119
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