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BOLETIN
PANORAMA DE ESTUDIOS MORALES
No es necesario subrayar excesivamente el hecho de que en estos momientos los estudios morales se multiplican de modo tan asombroso que este campo resulta casi inabarcable. A primera vista podría parecer que tal afluencia de estudios se debiera a los intrincados problemas que los avances técnicos plantean al razonamiento ético. El juego del conflicto de valores, habitual en el planteamiento moral de las cuestiones diarias, ha dejado de discurrir por cauces conocidos y manoseados para suscitar frecuentes interrogantes sobre Ia misma posibiUdad de utilización de criterios y principios de discernimiento aplicables con honestidad y coherencia a todos los terrenos donde se trata, por ejemplo, del valor de Ia vida en confhcto con el valor de Ia libertad. Quiero eso decir que los estudios éticos no se limitan hoy a los problemas sectoriales, más o menos coyunturales, sino que abordan decididamente las cuestiones basilares que hoy considera el nuevo y renovado tratado de Etica Fundamental. De entre las numerosas obras que han llegado hasta nosotros y las muchas que nosotros hemos expresamente solicitado hemos seleccionado algunas que pudieran ser representativas de los diversos tratados morales, como pudieran ser: Ia fundamentación bíblica de Ia Teología Moral; manuales de Teología Moral; problemas de Moral Fundamental; cuestiones de moral de Ia persona, con especial referencia a Ia ética de Ia sexuah'dad y a Ia bioética; cuestiones de moral social, con especial referencia a Ia ética de Ia paz y de Ia guerra. La selección se cierra con una obra que podría ejemplificar, a modo de conclusión, las preocupaciones e investigaciones actuales en torno a Ia figura ética del cristiano en una sociedad secular. El panorama no es exhaustivo, pero no deja de ser significativo. Y nos Ueva a asomarnos a un amplio abanico de acercamientos metodológicos, más o menos aceptables, a los más urgentes problemas que Ia ciencia —y sobre todo, Ia técnica— están planteando a Ia reflexión ética de nuestros días. A través de estos estudios, escritos por cristianos de diversas confesiones y, en algún caso, también por miembros de Ia comunidad judía, podemos obtener una visión un tanto ecuménica de los estudios éticos contemporáneos. Pero, sobre todo, en casi todos ellos encontramos, si no idénticas conclusiones, al menos preocupaciones que a unos y a otros nos hermanan.
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