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GIOVANNI DOMENICO MANSI EN EL SEGUNDO CENTENARIO DE SU MUERTE El día 27 de septiembre de 1969 se cumplieron doscientos años de la muerte de Giovanni Domenico Mansi, bien conocido sobre todo por su colección conciliar. Con tal motivo S. S. Pablo VI dirigió un autógrafo al actual prelado de Lucca, en el que se exaltan las cualidades de Mansi como religioso, como pastor de almas y como hombre de estudio. G. D. Mansi nació en Lucca el 16 de febrero de 1692. Desde muy joven manifestó especial predilección por los estudios humanísticos y particularmente por los históricos. A los 16 años entró en el noviciado que tenia en Nápoles la Congregación de Clérigos Regulares de la Madre de Dios, donde profesó dos años más tarde. Pronto se distinguió como teólogo, en el más amplio sentido de la palabra, cultivando varias especialidades que caen dentro de la teología en un sentido amplio, Enseñó teología moral en Nápoles por espacio de varios años. Llamado por el arzobispo Fabio Colloredo, volvió a Lucca, donde fundó una academia de historia de la Iglesia y de liturgia. Fue, además, hombre de la confianza de Colloredo en los asuntos del gobierno de la diócesis. Realizó frecuentes viajes de estudio a Turín, Milán, Venecia, Viena, Nápoles, Montecassino y Roma. Gozó de la protección de varios mecenas que facilitaron notablemente su labor editorial. También fue blanco de acusaciones (serias para aquel tiempo) como las que le vinieron de parte del dominico Daniel Concina, líder de los antiprobabilistas, quien vio en la obra de Mansi sobre los casos reservados "muchas proposiciones falsas y erróneas" que según el polemista dominico merecían la condenación de Roma. Lo cierto es que Roma permitió e incluso alabó la publicación de la obra de Mansi. Otro serio percance fue la oposición intransigente de Roma a la publicación de la famosa Encyclopédie francesa de Diderot-d'Alambert, que Mansi intentaba editar con notas suyas tendentes a la. rectificación en aquellos lugares donde el dogma católico salía mal parado. Este proyecto, que a nuestro juicio merecía luz verde, encontró la negativa de Roma. Pasado ya este incidente, todavía le dirá el papa Benedicto XIII: 'Padre Mansi, ci é nota la vostra virtú, pericó fate assai meglio impiegarla nella grand'Opera d'Concilii, di quello che nell'Enciclopedia'.
1 Para ulterior información sobre la vida y actividades de Juan Domingo Mansi, pueden verse los siguientes trabajos: G. FRANCESCHINI 'Commentarium de vita et scriptis Ioannis Domicini Mansr, en el vol. 19 de la Nova et Amplissima Collectio (Venecia 1774) ix-li (siguen todavía, en las pp. lii-lxviii, varios panegíricos sobre Mansi); D. PACCHIUS 'Vita', en el vol. 1 de la Bibliotheca Latina de J. A. Fabricius (ed. Florencia 1858-59); H. QUENTIN lean Dominique Mansi et les grandes collections conciliaires (París 1900); J. HEFELE H. LECLERCQ Histoire des Conciles I-1 (París 1907) 111-114; C. TESTORE 'Maná', Enciclopedia Cattolica 7 (Roma 1951) 1979; R. 13'ilumER: 'Mansr, Lexikon für Theologie und Kirche 2, ed. 6 (Freiburg i/111 1961) 1365; H. RUMPLER 'Mansi', The New Catholic Encyclopedia 9 (New York 1967) 173.
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