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CRÍTICA DE LIBROS
Ildefonso M U R I L L O (Ed.), Religión 2006) 870 páginas
y persona (Edic. Diálogo Filosófico, Madrid
Nuevamente Diálogo Filosófico ofrece al público una obra indispensable para que el lector pueda ponerse al día sobre el estado de la cuestión de un tema sustancial en el panorama del pensamiento. Se trata en este caso de un tema siempre álgido, pero que especialmente lo es hoy: Religión y persona. En realidad el libro recoge las aportaciones que una pluralidad de pensadores hicieron en las Jornadas celebradas en la Universidad Pontificia de Salamanca. El libro tiene el mérito de abordar el tema de la religión y de la persona desde un amplio espectro de perspectivas, tanto en lo referente a la estructuración del problema en sus múltiples dimensiones, como en lo referente a la diversidad y pluralidad de enfoques, lo que, sin duda, permitirá al lector hacerse una idea cabal de cual es la situación del pensamiento actual en torno a esta problemática. El libro está estructurado en tres partes fundamentales, separando lo que en su día fueron las ponencias principales de las aportaciones en forma de comunicación. La primera parte está consagrada específicamente a la dimensión religiosa de la persona humana, y en ella se encuentran los estudios de Santiago del Cura en torno a la contribución del cristianismo al concepto de persona, donde se ofrece una completísima exposición del tema desde sus orígenes hasta la situación actual, alertando sobre las posibles consecuencias de la disolución del concepto de persona en múltiples corrientes actuales del pensamiento "pragmatistas o posthumanistas". Miguel García-Baró rastrea el sesgo personalista del pensamiento judío contemporáneo, aspecto éste fundamental no sólo para el diálogo interreligioso, sino también para una correcta comprensión del pensamiento judío, tan relevante en la filosofía contemporánea. Andrés Torres Queiruga, Gonzalo Tejerina, Juan Martín Velasco y Jose Luis Caballero abordan en sus respectivos trabajos principalmente el tema de la peculiaridad de la experiencia religiosa. Las comunicaciones, de gran calidad, diseccionan el tema de la experiencia religiosa sobre todo en diversos pensadores de distintas épocas: Tommaso Demaria, Max Scheler, Mircea Eliade, Zubiri, etc. La segunda parte aborda la dimensión cultural de lo religioso. En ella encontrará el lector las aportaciones de Jacinto Choza, analizando las "contradicciones culturales del cristianismo"; de Ildefonso Murillo reflexionando sobre la especificidad del lenguaje en torno a Dios; de Agustín Andreu sobre el tema de la fe en Clemente de Alejandría; de Alejandro Llano analizando la antropología de la religión de Rene Girard, o la crítica del recientemente desaparecido José María Mardones a lo que él considera una concepción positivista y estrecha del lenguaje religioso (actitud que llevaría a posiciones cerradas de sesgo integrista en religión), proponiendo una concepción del mismo enraizada en la hermenéutica, única filosofía que sería capaz de salvar la condición verdaderamente apertu-
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