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VIDA PRERREFLE>OVA Y TIPOS DE REFLEXIÓN
El problema de Ia reflexión y de Ia vida prerreflexiva parece no tener fácil cabida en el panorama filosófico actual, porque es una cuestión que se inserta dentro de Io que se ha dado en llamar el «paradigma de Ia conciencia». La reflexión y Ia vida prerreflexiva son tipos de cogito, de conciencia, y las frecuentes críticas postmodernas al cogiío por parte de autores como G. Deleuze, M. Foucault, C. Lévi-Strauss, J. F. Lyotard, G. RyIe, R. Rorty..., han acabado supuestamente con cualquier intento de etaborar un discurso váüdo acerca de ta conciencia. Pero, a pesar de las objeciones postmodernas al cogito, resulta ineludible el hecho de que, en Ia vida que todos vivimos, nos sentimos de buen o mal humor, experimentamos deseos de muy distinto tipo, tenemos proyectos de mayor o menor importancia, se nos dan las cosas que nos rodean en vivencias de tipo perceptivo, recordamos sucesos que tuvieron lugar hace ya mucho tiempo... y son precisamente estas múltiples experiencias vividas las que integran el cogito prerreflexivo. También reflexionamos acerca de nuestra propia vida: no sólo podemos volvernos reflexivamente sobre Ia experiencia del presente momentáneo, sino que, ante todo, acostumbramos a ocuparnos con aquellas vivencias que, aunque pertenezcan a un pasado más o menos lejano, siguen poseyendo interés en el momento actual de nuestra vida. Esta reflexión, que, sin duda, en muchas ocasiones puede servir para orientar y dirigir Ia vida prerreflexiva, es Io que denominamos el cogito reflexivo. Aunque Ia vida ya disponga, en un plano prerreflexivo, de rasgos distintivos que Ia diferencian de Ia vida meramente animal, Ia reflexión representa una novedad radical que sólo es posible encontrar en Ia vida humana. Y es que, en realidad, Io que en el lenguaje cotidiano denominamos «vida humana» —para distinguirla de Ia vida animal— es Io que aquí voy a estudiar bajo el término técnico de cogiío i. Creo que bastará, entonces, con hacer un discurso cohe1 Para discutir el problema de Ia reflexión, no necesito plantear explícitamente Ia necesidad de partir de Ia reducción trascendental exigida por el fundador de Ia fenomenología, Edmund Husserl.
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