|
NUEVOS DOCUMENTOS INEDITOS SOBRE EL POETA
JUAN DE MENA
por VICENTE BELTRAN DE HEREDIA, O. P.
Los Registros vaticanos, tan frecuentados por investigadores extranjeros y que comienzan a serlo también por algunos españoles, han permanecido hasta estos años completamente vírgenes con respecto a Ia historia de nuestra cultura. Encaminados a ellos para ampliar de alguna manera Ia falta casi total en España de noticias y documentos acerca de Ia Universidad de Salamanca durante sus tres primeros siglos de existencia, hemos recorrido pacientemente en seis temporadas de otros tantos meses cada una —Io que nos permitía apurando hasta el máximum el compromiso de clases en Ia Pontificia Universidad Salmantina— cerca del millar y medio de volúmenes. Sin pretender agotar su contenido susceptible de interesar a Ia historia hispana y más concretamente de Castilla, hemos extractado Io de índole cultural, que es al mismo tiempo Io que más de cerca se relaciona con nuestra Academia y de otros centros docentes de Ia Península influidos por ella: Valladolid, Lisboa-Coímbra, estudios de Toledo, de Sevilla, de Palencia, etc. La misma historia de Ia Universidad de Lérida, aunque alejada esta institución de Salamanca, pues recibe sus influencias de Bolonia, Avifión y Montpellier, nos interesaba también por ser española. Y si bien se trata de un terreno explorado ya por los investigadores catalanes, todavía queda en los registros vaticanos mies abundante para quienes deseen ensayar una segunda vuelta. Este recorrido de gran envergadura, por eUo quizá demasiado rápido, nos ha ido suministrando datos preciosos no sólo acerca de las instituciones, sino también sobre algunas personalidades de Ia jerarquía española, que tienen además su puesto en Ia historia de las letras. En relación con esos primates eclesiásticos o simplemente con los incorporados por algún tiempo a Ia curia romana aparecen además otros que, si no lograron puestos encumbrados en Ia jerarquía, los conquistaron en el campo literario. De todo ello había que tomar nota, porque era completamente desconocido o faltaba Ia prueba documental y precisa que aflanzase el aserto vago de quienes se habían ocupado de esas personalidades y de sus escritos. Como ve el lector, el horizonte amplio que se presentaba a nuestra vista no era propicio para intentar una labor de síntesis, que hubiera sido
"Salmanticensis", 3 (1956).
|