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Al hablar de violencia sexual muchas veces se compendia el concepto aludiendo solo a dos cosas: machismo y violación. ¿Es esto tan simple? ¿Qué factores o aspectos pueden favorecer este acto? En este trabajo se intenta abordar no solo esto, sino que ademásse planteaun estudio con una muestra de 307personas empleando la escala AMMSA para la medición de mitos relacionados con la violencia sexual de manera sutil (Gerger, Kley, Bohner, & Siebler, 2007; Megías, Romero, Durán, Moya, & Bohner,2011), donde atendiendo a ciertas variables sociodemográficas (sexo, edad y nivel de estudios) y pensamientos (opinión respecto al feminismo yrespecto alos roles de género), se puede comprobarcomointeraccionancon los distintos mitos sexuales y parecenfavorecer la interiorización de los mismos. Los resultados han mostrado de manera exploratoria que las variables mencionadas sí determinan diferencias significativas en la aceptación de ciertos mitos, confirmando las hipótesis planteadas a raíz de estudios anteriores y reafirmandola necesidad de atender a las mismas para un adecuado abordaje en la percepción social de la violencia sexualy la formación de estereotipos
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