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RECENSIONES
1)
SISTEMATICA
P. Adnès, La Penitencia (BAC 426, Madrid, La Editorial Catók'ca 1981) 310 pp. Deintro de Ia colección Historia Salutis, serie de monografías de Teología dogmática, se nos ofrece Ia obra del conocido teólogo de Ia Gregoriana. La obra viene dividida en tres partes. En Ia primera ofrece el dato de Ia Escritura, en Ia segunda el dato de Ia tradición. La tercera tiene por título «enseñanza del magisterio y problemas teológicos más recientes» y en eUa, tras un capítulo sobre el Protestantismo, se hace un análisis del concilio de Trento y de Ia controversia postridentina sobre Ia atrición suficiente. Lo demás de esta tercera parte corresponde a Io que el autor denomina 'problemas teológicos más recientes'. En concreto son: Ia dimensión eclesiológica de Ia penitencia, Ia confesión de los pecados veniales, los problemas peculiares de Ia administración del sacramento y más en concreto con relación al nuevo ritual, Ia satisfacción, las indvdgencias y por último un capítulo en el que se estudia Ia penitencia en correlación con el bautismo y Ia eucaristía. El esquema es clásico. La obra es sólida, el autor está bien informado, y aporta en notas una buena bibliografía. Se trata, pues, de una obra con garantías. Sin embargo Ia lectura me ha proporcionado algunas dudas, precisamente con relación a algo que C. Pozo alaba en el prólogo. Pozo subraya Ia importancia de Ia segunda parte en Ia que «el lector podrá apreciar el buen sentido eclesial con que el autor enfoca los datos de Ia historia del dogma, y con el que somete a crítica determinadas síntesis apresuradas, hechas a partir de ellos» (p. 18). La historia del dogma es clave en este sacramento. Hay un peligro a Ia hora de leer Ia historia: Ia de querer leer en Ia historia cuestiones que igual no se plantearon, siendo, sin embargo, necesario retomar el espíritu de Ia historia para ver de plantear las nuevas cuestiones que han surgido en Ia vida eclesial a Ia luz del espíritu eclesial mostrado en Ia misma historia. Nuestro autor a propósito de las absoluciones colectivas de Ia edad media indica «que hay una literatura reciente que no siempre está desprovista de preocupación por interpretarlas en sentido favorable a determinadas reformas deseadas de Ia disciplina penitencial moderna» (p. 234, nota 8). Estamos de acuerdo con el autor en subrayar el peligro, peligro que también se puede dar a Ia inversa al querer leer desde Trento toda Ia historia. Un párrafo del autor a propósito de Ia «comparación entre Ia práctica actual y Ia práctica antigua» (p. 210) viene a propósito de nuestra cuestión: «junto
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