|
EL OFICIO ECLESIASTICO EN EL CODIGO DE DERECHO CANONICO Y EN EL CONCILIO VATICANO II
Querríamos contribuir en lo posible a esclarecer y componer las discrepancias que sobre el concepto del oficio eclesiástico se han suscitado entre el Código de Derecho canónico y el Concilio Vaticano II. Ya el jurisconsulto romano lavoleno sentó esta afirmación : "Omnis de-
finitio in jure civili periculasa est, parum est enim ut non subvertí possiri. Es verdad ; toda definición es peligrosa en el Derecho; porque por maravilla habrá una que no pueda echarse abajo. Por tal razón nuestro Código canónico rehuye dar definiciones; y las pocas que da en su mayoría están sujetas a impugnaciones y controversias. Tal sucede con la noción del oficio eclesiástico. No es esta la que menos controversias ha suscitado; y no poco nos ha dado que pensar durante nuestro largo magisterio.
EN EL CÓDIGO CANÓNICO
El can. 145 da dos definiciones del oficio eclesiástico correspondientes a dos conceptos distintos: Oficio en sentido lato, amplio, es "quodlibet munus quod in finem spiritualem legitime exercetur". "Cualquier cargo que legítimamente se ejerce para un fin espiritual". En sentido estricto "munus ordinatione sive divina sive ecclesiastica sta-
biliter constitutum, ad normam sacrorum cananum con ferendum, aliquam saltem secumferens participationem ecclesiasticae potestatís, sive ordinis sive iurisdktionis". Para el Derecho oriental Pío XII añadió el miembro: aut aliam publicam potestatem 2 . "Es un cargo constituido de manera estable por ordenación divina o eclesiástica, que ha de conferirse según las normas de los sagrados cánones, y lleva aneja al menos una participación de la potestad eclesiástica de orden o de jurisdicción". Según esto, en el oficio estricto entran los cuatro elementos siguientes: a) Constitución o creación hecha por autoridad divina o eclesiástica. De institución divina son el pontificado supremo del Papa, y el episcopado subordinado de los obispos. De institución eclesiástica todos los demás oficios que hay en la Iglesia : el de párroco, canónigo, etc.
1 2
Digesto, lib. 50, tít. 17, leg. 202. Motu proprio de 9 de febrero de 1952; AAS. 44, 126.
11
|