|
(III)
PALABRA Y SACRAMENTO COMO SIGNOS DE LA IGLESIA
«¿En qué quiere o puede un pobre hombre ¡luso detectar dónde se encuentra en el mundo tal pueblo santo cristiano?». Es esta una .pregunta que Lutero, plantea en su importante obra tardía Von den Konziliis und Kirchen (1539), después de haber definido a Ia Iglesia como «pueblo santo cristiano». Responde con Ia enumeración de siete signos distintivos: palabra de Dios, bautismo, sacramento del altar, el poder de las llaves, Ia institución de ministerios en Ia iglesia, oración, Ia cruz de los cristianos. «Estos son los siete aspectos principales de Ia sublime salvación mediante Ia cual el Espíritu Santo efectúa en nosotros una santificación y vivificación cotidiana en Cristo», añade al final. «Quisiera denominarlos los siete sacramentos, pero ya que los papistas han falseado Ia palabra sacramento y ya que en Ia Escritura es utilizada de otra manera, los he dejado como siete aspectos principales de Ia santificación cristiana» *. Completando, Lutero menciona todavía las buenas obras de los cristianos como signos de Ia Iglesia que ciertamente no son tan claros como los que se encuentran también entre los infieles. Lutero pregunta por Ia posibilidad de reconocer a Ia Iglesia en este mundo. La respuesta que da es, a primera vista, sorprendente sobre todo a causa de Ia enumeración de los signos distintivos de Ia Iglesia efectuada aquí por él. Junto a los «medios de Ia gracia», palabra, bautismo, Eucaristía, llaves, son mencionados Ia vocación a los ministerios en Ia Iglesia
1
WA 50, 628, 19; 625, 4; 642, 32.
397
|