|
Papeles Salmantinos de Educación -Núm. 2, 2003Facultad de Pedagogía, Universidad Pontificia de Salamanca
TRES CONFERENCIAS DE FREIRE Y UNA CHARLA ABIERTA CON LOS ALUMNOS EN LA UNIVERSIDAD PONTIFICIA DE SALAMANCA. (I) 1
Antonio García Madrid RESUMEN: Paulo Freire regentó en noviembre de 1984 la cátedra extraordinaria “San José de Calasanz” de la Facultad de Pedagogía de la Universidad Pontificia de Salamanca. Disertó académica y formalmente sobre “¿Para qué educamos?” y sobre “Las virtudes del educador”, pero se negó en la tercera intervención a proceder al uso universitario y se abrió a todos en diálogo. También mantuvo un encuentro directo con los estudiantes de la Facultad. Aquellas palabras son las que aquí se presentan y reproducen.
Si no recuerdo mal, Paulo Freire estuvo en Salamanca allá por el año 1984, invitado por la Facultad de Pedagogía de la Universidad Pontificia de Salamanca. Llegó el viernes 23 de noviembre. Parece que dedicó el fin de semana al descanso y a la visita de la ciudad. Nos regaló tres conferencias, una de ellas muy particular, y mantuvo un encuentro abierto con los alumnos. Y se marchó el miércoles 28, con la promesa de volver para ser investido doctor honoris causa, ceremonia que nunca acaeció, no se sabe bien el porqué 2.
1 Parte primera que comprende las dos conferencias iniciales. La tercera conferencia, muy peculiar, y la charla abierta e informal con los alumnos aparecerán en el próximo número de esta misma revista. 2 Jorge Sans Vila, que lo trajo a Salamanca, Decano de la Facultad y de quien salió la propuesta del doctorado, ha dejado caer alguna clave del asunto en un breve artículo con ocasión de la muerte de Freire. No traigo aquí este testimonio para añadir “morbo” al asunto (la Historia y los hechos están maridados y la verdad aparecerá) sino como prueba viva de la gran calidad humana de Freire. Atención: “A Paulo Freire, como tantos, le conocí primero “de oídas”. Luego “de leídas”, como tantos. “En 1984 “de convividas” porque residió en mi casa cuando vino a Salamanca a dar unas conferencias. “Era un hombre amoroso. Lo de la lucha de clases, digan lo que digan los que ni le han leído bien ni le han tratado, no era lo suyo.
237
|