SUMMA. Repositorio Institucional

DúUogo Ecuménico t. XXXII, n. 102 (1997) 17-48 ARTÍCULOS Y ESTUDIOS UN PROGRAMA PARA LA UNIDAD DE LA IGLESIA EN EL HEMISFERIO OCCIDENTAL 1. RETOS PARA LA DIVERSIDAD DE CULTURAS EN EL UMBRAL DEL TERCER MILENIO La Iglesia Católica se ha comprometido con Ia unidad visible plena de Ia Iglesia y está dispuesta a ocupar su lugar junto con otros cristianos en el Movimiento ecuménico moderno. Como el Papa Juan Pablo II señala en su encíclica Ut Unum sint: «la búsqueda de Ia unidad de los cristianos no es un hecho facultativo o de oportunidad, sino una exigencia que nace de Ia misma naturaleza de Ia comunidad cristiana»1. No obstante, este impulso del Evangelio promulgado en el Concilio, y desarrollado tan fértilmente en los siguientes treinta años de colaboración y diálogo a todos los niveles, ha sido recibido y aculturado, en una gran variedad de modos, en los diferentes contextos del hemisferio occidental. La variedad de culturas, historias, experiencias locales y nacionales, devociones, realidades demográficas y económicas, recursos intelectuales e interlocutores ecuménicos constituye no sólo una diversidad de experiencias eclesiales cristianas sino también de experiencias ecuménicas católicas. ¿Es posible un programa común del hemisferio o incluso una comprensión mutua? 1 Ut Unum Sint, n. 49. 17

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