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REDC 72 (2015) 235-282
La «ley predicada». La tutela del espíritu de la vida consagrada en el código 1983
Resumen
El código del 1983 acoge cánones, alimento espiritual de la vida consagrada; se han espigado, agavillado y predicado a una comunidad de clausura, Agustinas recoletas; el Código, la «Ley predicada» en tiempo cuaresmal. Cuantos siguen pressius a Cristo en su Iglesia (c. 573, §1), militan bajo su única bandera y la suprema Ley Evangélica (c. 662), profesan el mismo estado de penitencia, «oraciones y lloros» (c. 663, §1), celebran la liturgia de alabanza (c. 607, §1), se acogen a la Virgen Nuestra Señora, Santa María (c. 663, §5) y extienden su Reino (c. 673); todo según la identidad de cada instituto (cc. 578, 587). Se habla de «siglos de legalismo». No faltarán autoridades legalistas, que conviertan en ajenjo la dulzura de la ley y usen de su fuerza al servicio de sus apetitos. Y santos religiosos cuya delicia está en «observar» las leyes de la Santa Madre Iglesia; de sus institutos también.
Palabras clave: Vida consagrada - código de derecho canónico, 1983; Vida consagrada - espiritualidad; Vida contemplativa - código de derecho canónico, 1983; Código de derecho canónico, 1983 - vida consagrada; Parenética - código de derecho canónico, 1983.
Abstract
The 1983 Code admits canons for the spiritual nourishment of Consacrate Life; developed, consolidated and preached to a cloistered community, the Augustinian Recollects; the Code is the «Law preached» in Lent. They are those who follow Christ more closely in his Church (c. 573,1), under their unique standard and the supreme law of the Gospel (c. 662), professing the same state of penitence, «prayers and cries» (c. 663, §1), celebrate the liturgy of praise (c. 607, §1), take refuge from Our Lady, the Virgin Mary (c. 663, §5), and extend His Kingdom (c. 673), all according to the identity of each institute (cc. 578, 587). It deals with «centuries of legalism». There is no shortage of legalistic authorities, wich turned bitter the sweetness of the law and used its strength to serve their own desires. It includes saintly religious whose delight is to «observe» the laws of Holy Mother Church and their institutes as well.
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