|
NOTAS
Salmanticensis 48 (2001) 81-121
LA BIBLIA, LIBRO SAGRADO. TEOLOGÍA DE LA INSPIRACIÓN EN LOS ÚLTIMOS DIEZ AÑOS
Como es bien sabido, el 18 de noviembre de 1965 el papa Pablo VI promulgaba Ia constitución dogmática Dei Verbum sobre Ia Sagrada Escritura, que tanto había de influir en todo Io referente a Ia teología de Ia Biblia. En España, por otra parte, después de algunos manuales clásicos, publicados tras el Concilio, pero en Ia misma línea anterior a él ', el primer manual universitario que asume el espíritu conciliar es, seguramente, el que aparece en 1989 con el título Biblia y Palabra de Dios, número 2 de Ia serie «Introducción al Estudio de Ia Biblia», amplia colección de introducción a Ia Biblia, publicada por Ia editorial Verbo Divino a iniciativa de Ia Asociación Bíblica Española 2 . En ese volumen, Antonio M.a Artola intenta una renovación de Ia teología de Ia inspiración y yo mismo elaboré una presentación relativamente nueva en el panorama teológico español, tanto de Ia historia y teología del canon bíblico, como de Ia hermenéutica bíblica. A poco más de diez años de Ia aparición de ese volumen, intento ofrecer en este trabajo un panorama crítico de Io que ha sido Ia reflexión posterior sobre Ia inspiración bíblica, teniendo en cuenta como punto de partida el manual dicho y el importante trabajo de A. M. Artola, «Trein-
1 Sobre todo, F. Fernández Ramos y otros, Manual Bíblico I. Introducción General a Ia Sagrada Escritura (Casa de Ia Biblia, Madrid 1966); y el monumental de M. Tuya - J. Salguero, Introducción a Ia Biblia, BAC 262, 268 (Madrid 1967). 2 A. M.a Artola - J. M. Sánchez Caro, Biblia y Palabra de Dios. Introducción al Estudio de Ia Biblia I (Estella 1989;41998); hay traducciones al italiano (ed. Paideia) y al portugués brasileño (ed. Ave Maria). Poco antes se había publicado Ia traducción castellana del renovador manual de V. Mannucci, La Biblia como Palabra de Dios. Introducción general a Ia Sagrada Escritura (Bilbao 1985; or. italiano de 1981); para otros manuales, véase Ia bibliografía de Biblia y Palabra de Dios, o. c., 24-25.
|