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EL DISCURSO DEL PADRE SANTO A LOS MEDICOS SOBRE EL PARTO SIN DOLOR
A. PREÁMBULO Los vehementes deseos de que el parto se realice sin dolor son un anhelo natural, explicable en toda mujer que va a ser madre. Hay que suponer, pues, y de ello tenemos constancia, que desde hace muchos siglos esto se viene intentando, si bien de una manera cientifica solamente desde hace poco más de un centenar de arios, cuando fueron conocidos los primeros anestésicos. Desde entonces, numerosas drogas y métodos se han ido ensayando, con mayor o menor fortuna, pero nunca a completa satisfacción del tocólogo: unas veces, por interferir la marcha del parto normal; otras, por complicaciones inmediatas o ta.rdias en la madre o el hijo; de vez en cuando algún caso fatal, irreversible, en la madre, sin contar las dificultades de otros muchos para sacar adelante algún recién nacido en el que no llegaba a normalizarse la respiración. Se comprende la cautela del médico consciente, católico, para utilizar tales drogas en' un parto catalogado como fisiológico, enteramente normal. Es por ello por lo que la aparición de los métodos psicoprofilácticos, métodos que no necesitan el recurso de ninguna medicación, haya sido recibida con el mayor entusiasmo. Cuál es el 'fundamento de estos métodos?: La escuela del famoso logo ruso PAVLOV —famoso por sus estudios sobre los reflejos condicionados— di6 a conocer en 192o, en Ukrania, su "método psico-profiláctico analgésico para el parto", basándose en que la maternidad, por ser una función fisiológica, deberla ser indolora, lo mismo que ocurre con la defecación, etcétera. Parece ser que en los albores de la Humanidad asi debió ocurrir, y que aún en la actualidad algo semejante ha sido comprobado en as mujeres de algunas tribus salvajes, muy primitivas, como todavia se encuentran en algunas zonas aisladas de los continentes africano y americano (DicK READ). Si el parto se ha trocado tal y como hoy lo conocemos es porque, a través de los siglos de civilización, una serie de factores de primordial componente psiquico han determinado una verdadera "herencia psicológica" de que el parto es doloroso, a partir de aquellas parturiciones,
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