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Introducción y saludo
Alfonso Salgado Ruiz Director del Instituto Superior de Ciencias de la Familia UPSA
Sin duda, uno de los acontecimientos más importantes en el discurrir de la vida universitaria, por lo que tiene de cambios, de novedad, y de esperanza de avance y mejora, es el nombramiento de un nuevo rector. El rector –y con él, su nuevo equipo de gobierno– es la máxima autoridad de la universidad, que ejerce su servicio acompañado y ayudado por otras figuras y órganos para poder llevar a cabo iniciativas y trabajos que aseguren calidad y eficacia en la consecución de los objetivos cotidianos y extraordinarios de la vida universitaria: investigación, docencia, transferencia de conocimientos a la sociedad y aportaciones desde la academia al servicio de las personas a las que la universidad se debe. A principios de septiembre tuvo lugar el nombramiento del nuevo rector de la Universidad Pontificia de Salamanca en la persona de Ángel Galindo García, que fue hasta entonces, decano de la facultad de Teología y, lo más importante para nosotros, Director del Instituto Superior de Ciencias de la Familia. A la esperanza renovada y el compromiso de muchos ante el nuevo periodo que se iniciaba para todos, se unió la alegría y el orgullo por el nombramiento de quien había dirigido en los últimos años con mucho trabajo, mucha ilusión, mucho acierto y, por qué no decirlo también, con una enorme dosis de cariño, el Instituto de la Familia y nuestra revista Familia. Desde el Instituto de Ciencias de la Familia estamos convencidos de que la capacidad de trabajo y la claridad en los objetivos que deben guiar el quehacer de la Universidad Pontificia de Salamanca en estos nuevos tiempos que ha demostrado Ángel Galindo se verán plasmados en nuevas iniciativas, nuevos proyectos y nuevos retos, que nos han de afectar a todos para ofrecer un mejor servicio a los auténticos destinatarios de la Universidad, que nos son ni los profesores, ni el personal de administración y servicios, ni son siquiera los alumnos que pueblan nuestras aulas, pasillos y bibliotecas, sino la sociedad y la 5
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