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Papeles Salmantinos de Educación -Núm. 5, 2005Facultad de CC. de la Educación, Universidad Pontificia de Salamanca
EL CABREO DE UNAMUNO … me encuentro en un estado tan de ánimo que me temo a mí mismo. Me temo; temo estallar un día contra todos esos políticos que me han amargado el alma y que al estallar se me estalle el corazón. En el archivo de la gestión personal de Maurice Legendre de la Casa de Velázquez, en Madrid, se encuentran documentos de importancia. Tantos años de permanencia en España le permitieron a Legendre el encuentro y la amistad con muchos de nuestros intelectuales de primera fila. Entre ellos Miguel Unamuno con el que consta una estrecha relación y una correspondencia fluida. Por desgracia, como confiesa Legendre en esos papeles, muchas de las cartas de Unamuno desaparecieron durante la guerra civil. Otras, como la que aquí se transcribe, sólo la conocemos por copia del amigo francés. La Gran Guerra europea había terminado, pero Unamuno no había terminado de batallar consigo mismo y con los demás, y, en grado extremo de cabrero, se temía a sí mismo. Un bello texto de un español peculiar.
A. G. Madrid
Mr. Maurice Legendre. En efecto, le han informado a usted bien, mi querido amigo, me encuentro en un estado tal de ánimo, que me temo a mí mismo. He pensado y pienso seriamente en irme de España, en desterrarme. Pero ¿a dónde? No sabe usted bien lo que he sufrido estos años, desde que empezó la guerra. Ustedes al fin, bien o mal y más o menos, han vencido, pero aquí los que desde un principio nos pusimos de parte de la civilidad y de la justicia y de la democracia, hemos sido vencidos. Alemania ha sido derrotada, pero el germanismo y la germanofilia, con su escuela de despotismo, de clandestinidad y de pretorianismo han vencido en España. Y aparte de esto, que es lo capital, porque es lo general, no sabe usted con qué bár243
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