SUMMA. Repositorio Institucional

PARA UNA TEOLOGIA DE LA PERMANENCIA EUCARISTICA por )ESUS ESPEJA, O. P. INTRODUCCIÓN El dogma eucarístico incluye tres verdades íntimamente unidas: conversión del pan y del vino en el cuerpo y sangre del Señor; presencia real de Cristo, como término de esa conversión; y permanencia bajo :as especies sacramentales, mientras éstas se mantegan incorruptas. Centramos Ia atención principalmente en este último punto : ¿la presencia de Cristo en Ia eucaristía se limita al momento de Ia comunión, o trasciende al sacrificio y banquete propiamente dichos? ¿la presencia del Señor bajo las especies sacramentales es una realidad que hacemos nosotros cuando comulgamos con fe, o más bien un don objetivo, rue Dios hace a su Iglesia y al mundo, independientemente de Ia buena acogida de los hombres? ¿el culto del pueblo cristiano a esta presencia permanente es invención de Ia Iglesia u obedece a Ia voluntad de Cristo? ¿este culto perjudica a Ia celepración comunitaria de Ia misa o más pien es algo exigido por el mismo sacrificio eucarístico? La respuesta a estos interrogantes es decisiva para Ia orientación de Ia piedad cristiana. Con Ia Iglesia Católica profesamos nuestra fe santa: «una vez reulizada Ia consagración, el cuerpo y Ia sangre de Nuestro Señor Jesucristo permanecen en el admirable sacramento de Ia eucaristía, no sólo mientras se comulga sino también antes y después, en todas las hostias y partículas consagradas, que se reservan después de Ia comunión» '. Con1. Conc. Trid. Ss. XIII, Cns. de ss. Euch. sacramento, can. 4, Dz. 886.

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