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ACTUALIDAD
IN MEMORIAM
jAGQUES DENIS
"Soy sacerdote, ante todo; mis diferentes ocupaciones —capellanía, profesorado, secretariado— no son más que medios para ejercer mi sacerdocio. El sacerdocio que en mí transforma todas esas ocupaciones y da unidad a mi vida". Quien así escribía era un insigne canonista, monseñor Jacques Denis, fallecido el día 21 de octubre de 1978 en el Hospital de Sens, de angina de pecho. Muchos de nuestros lectores Ie recordarán. Como escribió a su muerte el P. Bousserolle: "estaba dotado de una inteligencia excepcional a Ia que supo dar su plena expansión. Hombre de orden y método, lleno de humor y delicadeza, se apasionaba por su trabajo. No Ie entusiasmaban las visitas inoportunas, pero sabía recobrar rápidamente su calma y su sonrisa. Dotado de una profunda sensibilidad, sabía sobreponerse, Io que Ie daba a veces una apariencia de reserva y de secreto. Lo que me impresionó más particularmente en él, fue siempre su humildad y discreción. Jamás se envanecía de su vasta erudición. Sabía escuchar. Se había comprometido a fondo en las nuevas orientaciones nacidas del Concilio. El, que parecía muy prudente, sabía tener sus audacias... Conseguía desaparecer y dejar a otros el cuidado de hacer Io que él habría querido realizar y no lograba... El Señor Ie ha llamado bruscamente. Nada dejaba adivinar un tan rápido final". En efecto, el jueves anterior, según nos cuenta Jean Passicos, decano de Ia Facultad de Derecho de París, había actuado en Ia jornada regional de Estudios canónicos, y aunque un poco fatigado, nada hacía sospechar que estuviera tan enfermo. Se despidió prometiendo estar presente en Ia reunión de Ia Facultad para estudiar el esquema dei nuevo Código acerca del pueblo de Dios, del que había aceptado ser ponente. Prometió también entregar sus crónicas para "L'Anné Canonique". Pero Ia muerte interrumpió su actividad. Había nacido el 22 de setiembre de 1905 en Joigny. Entró en el Seminario de San Sulpicio y se ordenó sacerdote el 15 de abril de 1933. Hizo su licenciatura en teología en el seminario "des Carmes", pero influenciado por su ambiente familiar, pues su padre era notario y un tío abogado, se especializó en Derecho canónico: 'icenciatura en Ia Gregoriana, una temporada en París, vuelta a Roma en 1937-1938, oonde estudia en Ia Rota y por fin defiende en París, en 1939, su tesis sobre Ia indisolubilidad del matrimonio de los infieles. Vuelto a Francia, es primero secretario y consejero del obispo monseñor Lamy, y pasa a ocuparse como vicario general de los asuntos materiales. En 1945 inicia Ia enseñanza del Derecho canónico en el seminario mayor de Sens. A partir de 1943 se incorpora al Instituto católico de París, primero temporalmente, después como profesor ' finalmente como decano (entre 1970 y 1975). Enseña también en Ia Facultad de Derecho canónico de Lovaina, de lengua francesa, e interviene en multitud de reuniones científicas. La revista "L'Année Canonique" publica frecuentes colaboraciones suyas. Tomó parte como experto en el Concilio Vaticano II. Al fallecer era vicepresidente de
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