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BIBLIOGRAFIA
HENRICUS
L. OFFMANN De testibus in processibus Beatificationis et Canonizationis testimoniorunique objectis (De los testigos y del objeto de los testimonios en los
procesos de Beatificación y Canonización). Vaticano, 1968; 270 págs. Un estudio teórico y práctico sobre la cuestión básica de los testigos en los procesos llamados sacros es tanto más meritoria y útil cuanto menor ha sido el número de autores que con detención y ex profeso han escrito sobre esta materia. En general, los comentaristas del Codex, después de haber tratado con amplitud lo concerniente a los juicios en la primera parte del libro de los procesos, casi se contentan luego con trazar las líneas fundamentales de los demás procesos con sus pruebas especiales correspondientes y el objeto de ellas. En la materia de los procesos sacros la obra clásica es la de Benedicto XIV: De Servorum Dei Beatificatione et Beatorum Canonizatione. Más tarde, prestó un gran servicio a teóricos y prácticos el jesuita P. Azevedo (1713-17459), quien condensó y enriqueció con índice utilísimos la obra voluminosa de Benedicto XIV - Lambertini dando otra más asequible y manejable: Benedicti XIV Doctrina de Servorum Dei Beatificatione et Beatorum Canonizatione in synopsim redacta. Después del Codex el libro más en uso entre quienes han tenido que intervenir en esta clase de procesos ha sido el Codex pro Postulatoribus Causarum Beatificationis et Canonizationis, cura Postulationis Generalis Ordinis Fratrum Minorum, cuyas ediciones continuadas prepararon Luis Lauri, José Fornari y Antonio M. Santarelli. Menos divulgada, pero más sólida, es la obra de monseñor L. Indelicato: Le basi giuridiche del processo di beatificazione. Dottrina e Giurisprudenza intorno del processo di beatificazione delle Causae dei Servi di Dio. Ahora el Doctor Enrique L. Offmann nos ofrece un estudio concienzudo sobre los testigos y el objeto de los testimonios en los procesos sacros. Acerca de uno y otro tema nos da en la introducción una vista histórica de la evolución que han ido teniendo estos procesos. El fondo de su trabajo lo divide en cinco parte: En la primera trata de las pruebas en general, según el Codex, y de las pruebas propias en los procesos sacros. En la segunda estudia las condiciones psicológicas precisas para testimoniar. En la tercera, las condiciones especiales de los testigos en los procesos sacros. En la cuarta, las diversas clases de testigos atendiendo a su ciencia. En la quinta, el objeto de los testimonios y el número de testigos que se precisan para adverar las diversas clases de objetos. Ya por esta simple enumeración de materias y estudios puede verse la importancia principal que da el autor a las cualidades, generales y especiales, de los testigos, cuya prueba es la reina en esta clase de procesos. Los testigos más valiosos son los de ciencia propia. A falta de testigos de vista o inmediatos, se va recurriendo por orden descendente a los testigos de oídas que recibieran el hecho de personas que lo presenciaron; después a quienes lo oyeron a personas que lo habían oído a los testigos presenciales. El proceso sacro no es propiamente contencioso, aunque parece tener forma de juicio. Sin embargo, es preciso someter todas las pruebas a la más rigorosa crítica, en atención
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