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EL JUBILEO DEL ANO SANTO
La celebración del Año Santo dió siempre lugar al ílorecimiento de abundante literatura vulgarizadora sobre el tema del Jubileo ; en Ia mes!a tengo varios opúsculos publicados para conmemorar el de 1900, 1925 y el de Ia Redención, pero ninguno de los anteriores se preparó con tan minuciosa organización y tan extensa y clamorosa publicidad. En las revistas católicas de todo el mundo han aparecido comentarios más o menos científicos de los documentos pontificios sobre el Santo Jubileo. Aquí en Roma son varias las revistas dedicadas a informar exclusivamente sobre los •diversos aspectos del Año Santo. El Comité Central tiene su "Bolletino Ufficiale del Comitato Centrale Anno Santo MCML". Quien quiera informarse brevemente de Ia historia del Año Santo y características de! actual puede leer con provecho el opúsculo de 150 páginas dz L. GiUNXA L'Anno Santo. Storia, Dottrina, Li'.wgia (Cittá del Vaticano) ; quien desee un comentario y estudio directo de los documentos pontificios sobre el Año Santo de 1950 'o hallará claro y preciso y avalado por Ia autoridad del Secretario de Ia Sagrada Penitenciaría Apostólica en el libro L'Anno Santo i9$o nel conwñento delle Constitusioni Apostoliche di Sua Santita Pio XII (183 páginas, Comitato Centrale,dell'Anno Santo) por el sacerdote GiusEppE Rossi, Secretario della Sacra Penitenziaria Apostolica. Esta obrita tiene dos partes y un apéndice ; al final transcribe los documentos pontificios ínlegramente y en latín. La primera parte es propiamente de comentario; Ia segunda, más breve, es práctica y puede titularse "En peregrinación a Roma". Al título tercero de Ia primera parte se añade un interesante apéndice, e! Decreto "Lex Sacri coelibatus", de Ia Sagrada Penitenciaría, i8 abril 1936, al que siguió Ia declaración de 4 de mayo de 1937 y el Decreto de Ia Suprema Sagrada Congregación del Santo Oficio contra el comunismo dado el i de ju 1 io de 1949. Si alguno deseara «studiar directamente Ia documentación pontificia, puede hacerlo en "Acta Apostolicae Sedis". Cuatro son las Constituciones, como de costumbre, a las que siguieron los Mónita o avisos de Ia Sagrada Penitenciam.
Co N S T I TU C I ON E S
Jubüaeum Máximum; por Ia que se promulga el Jubileo. Fore Confidimus: suspensión de indu'gencias y facultades. Decessofmn- Nostrorum:
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