SUMMA. Repositorio Institucional

DiEc1. XXX, n. 97 (1995) 243-255 NOTAS Y COMENTARIOS CAMINO HACIA LA UNIDAD PLENA Sobre Ia Declaración cristológica común entre Ia Iglesia Católica y Ia Iglesia asiria de Oriente En Ia reciente Carta Apostólica Tertio millennio adveniente, el Papa Juan Pablo II nos invita a prepararnos para el inminente jubileo que celebraremos con ocasión del año 2000 de Ia era cristiana. En sus palabras se advierte claramente una insistencia ecuménica y un deseo de fomentar el diálogo y Ia unidad entre todas las Confesiones, Iglesias y religiones para celebrar juntos el mencionado jubileo. Así Io expresa en este precioso texto tomado de Ia Carta a Ia que nos referimos: «Entre las súplicas más fervientes de este momento excepcional al acercarse un nuevo milenio, Ia Iglesia implora del Señor que prospere Ia unidad entre todos los cristianos de las diversas confesiones hasta alcanzar Ia plena comunión. Deseo que el jubileo sea Ia ocasión adecuada para una fructífera colaboración en Ia puesta en común de tantas cosas que nos unen y que son ciertamente más que las que nos separan. A este propósito ayudaría mucho que, respetando los programas de cada Iglesia y comunidad, se alcanzasen acuerdos ecuménicos para Ia preparación y celebración del jubileo: éste tendrá aún más fuerza si se testimonia al mundo Ia decidida voluntad de todos los discípulos de Cristo de conseguir Io más pronto posible Ia plena unidad en Ia certeza de que nada es imposible paraDios.*1 Entre las sugerencias y medios que propone el Santo Padre para celebrar más unidos el jubileo menciona Ia posibilidad de alcanzar acuerdos ecuménicos. La Carta está fechada el día 10 de noviembre de 1994 en el Vaticano. Precisamente el día siguiente, 11 de noviembre, se produjo un acontecimiento de extraordina1 n. 16 Cfr. Juan Pablo II, Carta Apostólica Tertio millennio adveniente (1994), 243

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