|
RECENSIONES
Salmanticensis 52 (2005) 571-609
1) PATROLOGÍA
Albert Ferreiro, Simon Magus in Patristic, Medieval and Early Modern Traditions Studies in the History of Christian Traditions, 125 (Leiden – Boston: Brill 2005) XI, 371 pp.
El profesor de Seattle ha reunido quince estudios centrados o conectados con Simón Mago, catorce ya publicados en diversas revistas y misceláneas. Lo que comenzó como una investigación sobre los rasgos característicos atribuidos por los Padres a los herejes y que se había orientado a Prisciliano, le llevó a descubrir el papel central del Simón Mago no canónico. Por entonces no tenía idea de lo ubicuo que había sido Simón Mago en el arte y en la documentación literaria de las edades patrística y medieval. Su figura tuvo una larga trayectoria de adaptaciones de los que la usaron para condenar toda clase de herejías, magia, hechicería, gnosticismo e Islam o aun para promover el primado papal. Para los Padres de la Iglesia el Simón Mago de Hch 8,4-25 es uno mismo con el de los Apócrifos. La mayoría de los estudiosos están de acuerdo en que el Simón Mago del N.T. y el atestiguado por Justino en 1 Apol 26 y 56 y Trypho 120.6 (h. 150 d. C.) son la misma persona. Es una cuestión más controvertida si la secta simoniana del tiempo de Ireneo fue fundada originalmente por el Simón Mago del N.T. y si era ya un gnóstico. Lo que es indiscutible es que los Padres y escritores anónimos, con Ireneo de Lyón como principal punto de giro, comenzaron a adaptar al Simón Mago canónico para modelarlo en nuevos modos creativos. Los dos primeros ensayos del volumen tratan de las principales tradiciones de Simón y la historiografía moderna. El c. 1 muestra que el Simón Mago, conocido por Hch, Hechos de Pedro y la Pasión de los santos apóstoles Pedro y Pablo, fue usado metafórica y tipológicamente para censurar conducta inmoral, herejía doctrinal, magia y hechicería. Desde la antigüedad hasta fines de la Edad Media emergen tradiciones sobre Simón basadas en los textos canónicos y apócrifos y otras que les son independientes. Ferreiro acaba echando de menos una tarea interdisciplinar que combine todo este material sobre Simón para un estudio sistemático de su figura. Aún no se han acabado de sacar todas las implicaciones en la convergencia de fuentes apócrifas y canónicas en lo que la Iglesia patrística y medieval tenía por orto-
|