SUMMA. Repositorio Institucional

FAM 16 (1997) 9-25 ESTUDIOS Qué cultura para qué familia Javier Martínez Cortés Universidad de Comillas 1. Introducción. La compleja relación entre familia y cultura La finalidad de este estudio es intentar situar globalmente la relación entre cultura y familia. El pluralismo de las sociedades contemporáneas viene a añadir por su parte un quantum de complejidad a las ya complejas relaciones entre ambas magnitudes sociales. ¿Es posible llegar a un acuerdo sobre lo que debemos denominar «familia»? ¿No es la familia una magnitud histórica, que ha evolucionado, y lógicamente cabe pensar que seguirá evolucionando? Cobra sentido el detenernos un momento en esta reflexión sobre la familia de otras épocas y la de hoy, cuando nos interrogamos sobre las transformaciones culturales que afectan a una institución cuya universalidad parece indiscutible. Probablemente la familia es tan antigua como la cultura humana: formaría parte del proceso de hominización. Su cambio ha ido acompañando a los cambio del grupo social en el que se insertaba; y así el nombre de «familia» se convierte en un término con muchas acepciones. El sustantivo (famulus) es de origen latino y designaba, en la sociedad romana, al conjunto de esclavos y servidores que vivían bajo el mismo techo. Después pasó a designar la casa en su globalidad; y por extensión, el conjunto de parientes paternos y maternos. Y todo este grupo de personas se asociaría a los denominados parientes de sangre. Estos diversos círculos de pertenencia han variado de amplitud según el lugar y la época. Los análisis sociológicios señalan que la familia es parte de una estructura social determinada. La familia, además de ima constante antropológica, es una variable sociológica sobre la que influyen los procesos ideológicos, religiosos y personales. La familia de cada época es una creación cultural de la misma. Su sorprendente capacidad de permanencia va ligada a una no menos sorprendente flexibilidad y capacidad de adquirir formas 9

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