|
NOTA
CONCIENCIA Y LEY DE SANTO TOMAS A FRANCISCO SUAREZ JALONES DE HISTORIA
Es para mí un gran honor pronunciar Ia lección magistral en honor de santo Tomás de Aquino en este día de su fiesta. Siendo aún estudiante, como Francisco de Vitoria y Domingo Soto en Ia Universidad de París, en Ia perspectiva de mi plan de investigación estuvo siempre Ia universidad de Salamanca. Con ocasión de mi estancia en esta ciudad en 1956, tuve el honor y Ia satisfación de encontrarme con el P. Beltrán de Heredia, aquel gran investigador que me dio directrices que me han sido útiles a Io largo de toda mi carrera. Desde 1950, al menos cada cuatro años, doy, sea en Ia Academia Alfonsiana, sea en Ia Gregoriana, sea en el Angelicum, un curso consagrado a Ia moral de los maestros de Salamanca. Es el curso que no sólo me da más satisfación, sino que también apasiona más a los alumnos. Uno de los grandes méritos de Francisco de Vitoria como moralista fue el de introducir en Ia enseñanza universitaria de Salamanca Ia Summa theologiae de santo Tomás de Aquino. El Liber Sententiarum de Pedro Lombardo se contentaba con añadir las cuestiones morales a los tratados dogmáticos. La Summa theologiae da una importancia capital a Ia moral. Se ha podido calificar (sin acierto, a mi entender) Ia i a -H ae como «Moral general» y Ia II a -II ae como «Moral especial». Francisco de Vitoria, al editar en París el año 1512 Ia IIa-IIae de santo Tomás, expresaba su admiración por esta obra ya en el mismo título: «Sancti Doctoris divi Thomae Aquinatis Predicatorii ordinis Liber nomine Secunda Secundae, at meritis facile Primus». El renacimiento tomista de Salamanca fue ante todo un renacimiento de Ia moral. Con frecuencia se ha olvidado este aspecto '. Cuando el 6 de diembre de 1273, durante Ia misa de San Nicolás, Tomás de Aquino fue sacudido por una conmoción (conmotus), suspendió Ia redacción del tratado de Ia Penitencia. Ya no escribirá nada más. «No puedo, decía él, porque todo Io que he escrito me parece paja>. Llamado por el Papa Gregorio X al concilio que debía comenzar en Lyon el 7 de mayo de 1274, Tomás, enfermo, se puso en camino por obediencia. Probablemente viajaba en burro, y dio con Ia cabeza contra un árbol inclinado hacia el camino. Quedó tan
* La presente conferencia fue pronunciada en Ia Pontificia Universidad de Salamanca el 7 de marzo de 1989. 1 R. G. Villoslada, La universidad de París durante los estudios de Francisco de Vitoria (1507-1522) (Analecta Gregoriana XIV).
|