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EL CONOCIMIENTO DEL ALMA DE CRISTO, SEGUN LAS ENSEÑANZAS DE ANSELMO DE LAON Y DE SU ESCUELA *
por HORAOO SANT!AGO
El siglo XIi teológico comienza con Ia escuela de Laon. La colección de sentencias, que lleva el título pomposo de Líber pancrisis o Totus aureus, cita, a continuación de seis padres de Ia Iglesia —Agustín, Jerónimo, Ambrosio, Gregorio, Isidoro y Beda—, a los maestros modernos, Guillermo de Champeaux (t 1122), Ivón de Chartres (t 1116), Anselmo de Laon (t 1117) y su hermano Raúl (t 1121) '. Son los personajes más prestigiosos de todo aquel período. Con eUos se inicia el renacimiento teológico, que hoy llamamos escolástica. Les corresponde realmente el calificativo de teólogos ; pero son, ante todo, como hace notar el referido documento, maestros de Ia ciencia sagrada y fundadores de las nuevas escuelas urbanas. Durante unos treinta años dirigió Anselmo, con gran prestigio, Ia escuela episcopal de Laon. Por sus aulas pasaron numerosos discípulos, algunos de los cuales serían más tarde directores de nuevas escuelas teológicas. El magisterio de Guillermo de Champeaux —discípulo y contemporá-
(*) En el curso de este trabajo utilizaremos las sigutentes siglas: BGPM, Beiträge zur Geschichte der Philosophie des Mittetolters (Münster i. W.); BGPTM, Beiträge zur Geschichte der Philosophie und Theologie des MitteMters (Münster i. W.); DIv. th. (Pi.), Divus Thomas (Piacenza); RTAM, Recherches de théologie ancienne et médiévale (Louvain); RHE, Revue d'histoire eccUsiastique (Louvain); RMAL, Revue du moyen-âge latin (Strasbourg); RSPT, Revue des sciences phUosophiques et théologiques (Paris); Sp. sac. lov., Spicilegium sacrum lovanientte (Louvain). 1. «Incipit Liber pancrisis, id est totus aureus, quia hlc auree continentur sententie uel questiones sanctorum patrum, Augustini, Iheronimi, Ambrosii, Gregorii, Ysidori, Bede, et modernorum magistrorum, Willelmi, catalaunensis episcopi, Iuonis, camotensis episcopi, Ansetaü et fratris eius RaduIfl...». Ms. Troyes, Bibl. de Ia ville, 425, f. 95 ra. Al final del manuscrito y con letra posterior encontramos repetido el mismo texto, en el folio 149v.
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