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RECENSIONES
FiLiPPO DA GAGLiARi, O. F. M. Cap., Influssi di Agostino Steuco e di Ambrogio Catarino nelli "Exp'.anatio in Genesim" di S. Lorenzo di Brindisi. Uoma-Parigi-Tournai-New York, Dssclée y Cia, 1963. 75 pp. El contenido del libro corresponde exactamente a su enunciado. El autor quiere completar el trabajo de los editores de Ia Opera Omnia (Padua 1935) de San Lorenzo de Brindisi por Io que respecta a su Explanatio in Genesim, haciendo ver Ia dependencia del Santo Doctor de Agustín Steuco y Ambrosio Catarino. En Ia primera parts prueba, cotejando los textos, que San Lorenzo se inspira en el libro Recognitio Veteris Testamenti (Venecia 1529) de Agustín Steuco, y hace ver que el Santo Doctor no utilizó Ia Cosmopoeia, (Lugduni 1533), del mismo autor, por el mal ambiente que tuvo entre los tsólogos del Concilio Tridentino y haber sido incluido después en el índice de libros prohibidos por el Inquisidor General Gaspar de Quiroga (Madrid 1583). En Ia segunda parte prueba ampliamente que San Lorenzo siguió en su Explanatio in Genesim paso a paso el comentario de Ambrosio Catarino a los cinco primeros capítulos del Génesis (Enarrationes in quinqué priora capita libri Geneseos, Romae 1552), al menos para los tres primeros capítulos y parte del cuarto. Esta dependencia explica el por qué en Ia obra de San Lorenzo aparecen las tesis escotistas, que el teólogo dominico defendió. Termina el libro con un elenco de las dependencias de Ia Explanatio, de Ia Recognitio y de las Enarrationes. La exposición es nítida y clara y los resultados de Ia investigación del autor, incontrovertibles, al menos en cuanto prueba que San Lorenzo se inspiró en Steuco y Catarino. L. Arnaldich, O. F. M.
M. MEiNERTz, Teología del Nuevo Testamento, tr. de C. Ruiz-Garrido. Madrid, Ediciones Fax, 1963. 658 pp. Meinertz es profesor en Münster y desde hace largos años ha trabajado en Ia preoaración de este valioso libro. Si el epígrafe es atrayente y cargado de interés, Ia dificultad del tema es sencillamente enorme. Empresa de auténtico especialista ha sabido exponer eI tema con altura y superar airosamente las dificultades. Es el primer autor católico que ha expuesto el tema en su conjunto y ampliamente. Supérfluo sería recordar que ha consultado los últimos trabajos de las diversas confesiones cristianas. Meinertz quiere enseñar y exponer ante todo Ia teología del N. Testamento y por eso no polemiza de ordinario. El método seguido por el autor es el de exponer por separado el contenido doctrinal de los diversos libros, y de ahí que haya dividido su obra en cuatro secciones. En Ia primera se habla de Jesús y su doctrina utilizandofundamentalments los evangelios; en Ia segunda se estudia el cristianismo como aparece en Ia comunidad primitiva, sirviéndose para ello de los Hechos de los Apóstoles y cartas de Santiago y Judas ; en Ia tercera, que es Ia más amplia, se estudian más temas porque en ella se exponen las doctrinas paulinas completadas por el contenido de las cartas de S. Pedro : Ia redención, Ia justificación y Ia fe, Ia ética, Ia Iglesia, Ia escatologia, etc. ; Ia cuarta se limita a Ia teología de San Juan.
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