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DESPOJO DE UNA REVISTA SALMANTINA DESAPARECIDA, «LA BASÍLICA TERESIANA» (1897-1923)
psr LUIS SAI,A BALLIST
El espíritu emprendedor de Fr. Tomás Cámara y Castro, Obispo ilustre de Salamanca, a quien debe esta diócesis, y aun España, aquel ambicioso ensayo de un Colegio de estudios superiores eclesiásticos de Calatrava (1894-1911) y Ia ahora interrumpida construcción de un gran templo votivo en Alba de Tormes (1898), digno de guardar las cenizas de Ia Santa castellana, fué también el iniciador de una revista, «La Basílica Teresiana» que, modesta en un principio y sin otra ambición que Ia de fomentar Ia devoción a santa Teresa y allegar fondos para el mencionado templo, llegó a ser, en su última etapa, una de las mejores revistas provincianas del primer tercio del siglo. La abundancia de estudios, de verdadero mérito, que en ella flguran sobre Ia antigua Universidad de Salamanca y sobre otros temas, y Ia dificultad con que tropieza normalmente el bibliógrafo, aunque resida en Salamanca, para encontrar alguna de las raras colecciones completas de Ia misma, nos han sugerido Ia conveniencia de publicar en estas páginas el fichero de los artículos —no todos, sino los de algún interés científico— que en ella se publicaron. Echará de ver el lector que estos artículos son, e:.i su mayor parte, de los años 1914 a 1923, que corresponden a Ia tercera época de Ia revista. Porque conviene advertir que Ia numeración de los tomos de «La Basílica Teresiana» se distribuye en tres épocas distintas, cuyas fronteras vienen a coincidir aproximadamente con las de los pontificados de los PP. Cámara y Valdés y de D. Julián de Diego y Alcolea. En Ia primera época (tomos 1-8: 1897-1905) Ia revista es preferentemente piadosa; y Ia dirigen y redactan varios profesores y alumnos de Calatrava: D. José de Ia Mano, D. Tomás Redondo, D. Francisco Jarrín, don Román Bravo, D. Eloíno Nácar... A Ia segunda época (tomos 1-9: 1906-junio 1914) Ie da cierto tono aristocrático Ia dirección de Ia Excma. Sra. Infanta D.s María de Ia Paz de Borbón de Baviera. EHa escribe periódicamente sus memorias, y algún que otro nombre ilustre (R. Menéndez Pidal, P. Miguélez, O. S. A., Fr. Ge"Salmantlcensis", 1 (1954).
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