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RESEÑA JURÍDICO - CANÓNICA Enero-Abril, 1962
EN TORNO AL FUTURO CONCILIO ECUMÉNICO, VATICANO IIo
I
SU INDICCIÓN Y CONVOCACIÓN
Decididamente —y sin que ello signifique en modo alguno creer en agüeros ni en cosas supersticiosas— el 25 está resultando un número y un día, que hasta ahora ha traído muy buena suerte al futuro Concilio Ecuménico, Vaticano IIe, destinado (como vuelve a repetírnoslo una vez más Su providencial ideador, JuAN XXIII, felizmente reinante) a continuar "eam viginti maximarum Synodorum seriem, quae per saeculorum decursum ad caelestis gratiae in christifidelium animis incrementum et ad rei christianae progressum tantopere valuerunt"1. En un 25, efectivamente —el de enero de 1959— S. S. JuAN XXIII anunciaba a todo el mundo cristiano Su propósito firme de celebrarlo2. Y en otro 25 —el de diciembre de 1961— el mismo JuAN XXIII, ya casi ultimados los muchos y realmente arduos trabajos que Ia celebración de tamaña Asamblea suponía, hallábase en condiciones de poder convocarlo para el corriente año 1962, en Ia Basílica Vaticana y para los días "quos providentissimus Deus statuere dederit"', días que el mismo Papa especificaba posteriormente en el Motu Proprio Consilium, del 2 de febrero del corriente año 1962: a parti, del once de octubre de este mismo año*. Nueva e inesperada alegría ésta, que nos traía Ia Constitución Apostólica Humanae Salutis Reparator y que venía a multiplicar las no pocas ni efímeras, que traen siempre consigo para todos los hombres las fiestas tan alentadoras de Ia Navidad. Oigamos Io que a este propósito decía el autor de Ia citada Constitución Apostólica en el Mensaje radiofónico que, con motivo de dichas fiestas, dirigía a todos sus hijos, dispersos por el mundo entero:
Véase el A.A.S., vol. Véase nuestra Reseña pp. 123-124 y 433-434. 1 Véase el A.A.S., vol. 4 Véase el A.A.S., vol.
1 1
LFV (1962), fasc. 1, p. 8. correspondiente a los meses de enero-abríI 1959, vol. XTV, et 1, cit., p. 12. LTV (1962), fasc. 2, pp. 65-66.
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