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LOS LAICOS EN LA IGLESIA CATOLICA
PREAMBULO. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Sobre la noción del laicado y de su valor teológico y canónico, se esti llevando a cabo, en nuestros dias un importante trabajo de delimitación del tema y de la precisación doctrinal. La Acción Católica ha puesto (lc relieve el lugar de los laicos en la Iglesia y su colaboración estrecha con la jerarquía para la realización del Reino de Dios. Por su parte, Su Santidad No XII ha dado un amplio alcance positivo al canon 107 del Código cte Derecho Canónico, explicando la sintesis dogmática y mistica que implica ese texto constitucional. "Nuestro Redentor ha fundado una Iglesia jerárquica. Ha puesto una neta distinción entre los Apóstoles y sus sucesores, por una parte (a los cuales hay que añadir los auxiliares en su cargo), y los simples fieles, por otra; de la unión de estos dos cuerpos se forma el Reino de Dios de este mundo. La distinción entre clérigos y laicos es de Derecho divino (can. 107). Entre estos dos órdenes jerárquicos está intercalado el estado religioso, que tiene su origen en la Iglesia; y su razón. 4e ser, lo mismo gut su valor, dependen de su estrecha conexión con el fin de la Iglesia, que es llevar a todos los hombres a la santidad (I). La vida de !os cristianos "bajo la influencia de la Iglesia", se dirige a una meta idintica para todos; es decir, la santidad. Pero cada uno de los "estados de vida" al que los cristianos pertenecen en la Iglesia presenta sus caracte 1 isticas diferentes. Cada uno tiene su lugar en la organización jerárquica con la que Cristo ha estructurado su Iglesia, y que la Iglesia ha completado con los poderes que tiene recibidos de Cristo. Esta distinción de posiciones de cada fiel en la estructura de la Iglesia forma en su con junto cuerpo organizado. Los miembros que pertenecen a cada uno de estos estados de vida, clerical, laico, religioso, constituyen tres órdenes o rangos de vida social cristiana, y a la vez son colectividades organizadas y especializadas en el servicio único del Reino de Dios, el cual les da su cohesión esencial. Evidentemente que esta diversidad de organización constituye la Iglesia misma. Pia XII utiliza, acentuándola con más vigor, la expresión
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de 1 950.
(I) Alocución pontificia al primer Congreso internacional de Religiosos, S de diciembrs
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