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(II)
COMISION
MIXTACATOLICO-LUTERANA*
Martín Lutero, testigo de Jesucristo
I.—DEL CONFLICTO A LA RECONCILIACIÓN
1. Este año, nuestras Iglesias conmemoran el V Centenario del nacimiento de Martín Lutero. Ni Ia cristiandad protestante ni Ia cristiandad católica pueden ignorar Ia figura y el mensaje de este hombre. Situado en el umbral de los tiempos modernos, Lutero ha marcado de forma decisiva y hasta nuestros días el desarrollo de Ia historia de Ia Iglesia, de Ia sociedad y del pensamiento. 2. Durante siglos, Lutero fue ¡uzgado de formas diametralmente opuestas. Para los católicos fue durante mucho tiempo el hereje por excelencia. Se Ie reprochaba ser Ia causa misma del c!sma de Occidente. Por parte protestante, desde el siglo XVI, se ha glorificado a Lutero como héroe de Ia fe, glorificación a Ia que frecuentemente se añade su exaltación como héroe nacional. Pero, sobre todo, Lutero fue comúnmente considerado como el fundador de una nueva Iglesia. 3. En cada caso, el juicio emitido sobre Lutero marcha al unísono con el juicio formulado sobre Ia otra Iglesia Se acusaban recíprocamente de haber traicionado Ia verdadera fe y a Ia verdadera Iglesia. 4. En las Iglesias y en Ia teoolgía de Ia Reforma se redescubría Lutero desde los comienzos de nuestro siglo. Poco después comenzó también, del lado católico, un estudio creciente sobre Ia persona y sobre Ia obra de Lutero. Dicho estudio prestó una contribución científica notable al estudio sobre Ia Reforma y sobre Lutero, y, en
* Ofrecemos Ia traducción de Ecclesia, nr. 2136 (1983) realizada sobre texto francés de La Documention Cotholique, 3-7-1983 corregida parcialmente por Ia Redacción de Diálogo Ecuménico.
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