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BENITO SPINOZA, UN HOMBRE DEL SIGLO XVII EL SIGLO XVII: DESARROLLO DEL RACIONALISMO
El imperio de Ia escolástica hasta entonces dominante comienza a ser desbancado por el pensamiento moderno. Hacia mediados de Ia centuria, Ia filosofía cartesiana adquiría carta de naturaleza en Ia enseñanza holandesa *. Holanda era entonces el centro de atracción de los más reputados profesores en las diversas materias por una doble razón. En primer lugar, por las altas retribuciones ofrecidas y por las buenas condiciones de trabajo; y en segundo lugar, por su clima intelectual caracterizado por Ia «dulzura de Ia libertad». El despliegue histórico del pueblo holandés en buena parte del s. XVII está caracterizado por su racionalismo práctico. Ese racionalismo práctico, que tenemos que poner en relación con el espíritu mercantil dominante, era buen caldo de cultivo para que accediera a Ia superficie el movimiento secularizador en el contexto de las preocupaciones intelectuales y de los valores sociales. La cristaUzación de este movimiento Ia encontramos en Ia actitud de tolerancia religiosa que aUí floreció en este siglo XVII tan marcado por conflictos religiosos. Esa realidad holandesa del siglo XVII va a cristalizar en una gran obra de cultura: Ia pintura holandesa de este momento, que es Ia expresión perfecta de Ia mentalidad colectiva reinante. «El retrato de Holanda que nos legaron estos pintores resulta sorprendente como un caso nuevo. Jamás pueblo alguno había emprendido nunca, de manera tan entusiasta y exclusiva, Ia representación del mundo visible. Se trata de un arte sin protección oficial, sin temática autoritaria ni religiosa, que se ve obligado a servir los gustos populares, a ser su directa expresión. Este pueblo de mercaderes, industriales y nave1 El año 1663 se publican los Cogitata Metaphysica como segunda parte de los Principios de Ia Filosofía de Descartes. Estos dos textos, pensados y escritos en distintos momentos, logran una nueva significación al ser publicados juntos. Publicados conjuntamente por voluntad expresa de Spinoza son dos textos a través de cuyo análisis puede verificarse muy bien Ia sustitución de un programa de investigación por otro. En estos textos el papel de Spinoza puede ser considerado como el de un historiadorcomentarista. A través de su «comentario» (en el sentido medieval del término) de Ia filosofía de Descartes explica perfectamente cómo se genera en el siglo XVII un nuevo programa de investigación que va a acabar sustituyendo al escolástico, al que Spinoza considera como programa perimido por no explicar adecuadamente el problema del conocimiento científico (universales), de Ia duración y del tiempo, de Ia vida, etc.
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