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HEIDEGGER Y LA POSTMODERNIDAD
La relación de Heidegger con el pensamiento postmoderno ha sido afirmada, criticada, negada desde diferentes perspectivas. Algunos, como Habermas, Io critican por ver en él un continuador del nihilismo de Nietzsche, como un paso decisivo hacia un pensamiento postmoderno que no ofrece ninguna salida. Desde dentro de Ia postmodernidad, las posturas han sido diferentes. Lyotard Io rechaza porque ve aún en Heidegger un representante de Ia filosofía de los relatos y de las realidades absolutas. Otros, como Rorty, Io ven y Io aprecian como un precursor de Ia postmodernidad, aunque no haya llegado a sacar las últimas consecuencias. Y finalmente, otros, como Vattimo, ven en él el modelo para una filosofía postmoderna que siga siendo pensamiento y ontologia «débiles», sin llegar al relativismo de Lyotard o de Rorty. ¿Cuál es realmente Ia postura de Heidegger? ¿Es Heidegger un postmoderno? ¿Es, más bien, un precursor de Ia postmodernidad? Y en este caso, ¿de qué postmodernidad? ¿De Ia de Rorty, de Ia de Vattimo o de ninguna de ellas? ¿Nos muestra Heidegger el camino para una postmodernidad bien entendida? A estas preguntas quisiéramos dar una breve respuesta.
1. HEIDEGGER ANTE LA CRÍTICA POSTMODERNA Seguramente el representante más característico y al mismo tiempo el más radical de Ia filosofía postmoderna es J. F. Lyotard. En su libro La condición postmoderna Lyotard proclama Ia muerte de todo sistema o de todo relato filosófico. En general, en Ia modernidad se han dado tres metanarraciones: Emancipación de Ia humanidad en Ia Ilustración, teleología del espíritu en el idealismo y hermenéutica del sentido en el historicismo. Todas estas legitimaciones del saber estarían superadas. «En Ia sociedad y cultura contemporáneas, sociedad postindustrial, cultura posmoderna, Ia cuestión de Ia legitimación del saber se plantea en otros términos. El gran relato ha perdido su credibilidad,
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