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G. Pozzo: .Magistero e teologia in H. Küng e P. Schoonenberg (Roma, Cittá Nuova Editrice, 1983) 356 pp. Se trata de una tesis doctoral («disertazione» la llama el A. en la p. 16) con el prólogo del director de la misma Karl Becker, magnifico por su profundidad y claridad, admirablemente conjugadas. Tiene, por eso, las limitaciones clásicas de las tesis, como explicaciones a cada momento sobre el método que se está siguiendo. Fácilmente se podría haber acortado el libro en unas 30 páginas prescindiendo de aclarar lo que se va a hacer, lo que se está haciendo o lo que se ha hecho. Tiene también las ventajas de las tesis, por ejemplo la abundante bibliografía, que permite al lector hacerse cargo del estado de cada cuestión. El libro III del Código de Derecho canónico (por cierto no citado ni una sola vez por el A.) contiene unos cánones preliminares a los que este libro podría servir muy bien de excelente comentario: ¿Qué es el magisterio eclesiástico y cuál es el alcance de sus decisiones en el trabajo de los teólogos? No intenta hacer un tratado sistemático como respuesta, y así lo dice (p. 17), sino examinar algunas cuestiones, las que han suscitado dos autores contemporáneos: el holandés Schoonenberg y el suizo Küng, y no el conjunto de la doctrina por ellos expuesta, sino tan sólo las referentes al método teológico, es decir, a las relaciones entre las fuentes de la Revelación y el Magisterio. Hace algunas veces disgresiones sobre algún punto doctrinal ulterior, pero el conjunto de la monografía se mantiene en este propósito inicial (p. 22). Con un método analítico, que garantiza la objetividad pero que obliga a repeticiones, expone primero la doctrina de ambos autores (curiosamente en orden inverso a como figuran en la portada), los analiza después, y pasa en una segunda parte a hacer su confrontación con la doctrina del propio magisterio de la Iglesia, terminando con unas reflexiones y observaciones críticas de conjunto. Todo ello con un esfuerzo sincero por recoger el pensamiento de ambos autores en sí, prescindiendo de toda cuestión polémica en relación con la intervención de la Congregación de la Fe en el caso de Küng. No hay una sola afirmación que no tenga al pie la reseña del lugar en que el autor examinado ha dicho aquello. Pozzo se mueve en el ámbito de la doctrina de la Iglesia, tal como se manifiesta en los Concilios y en los Papas. Pone de manifiesto las contradicciones ime la posición contraria, bien ambigua (pp. 96-99 p. ej.), plantea frontalmente el problema de si existe el magisterio (p. 142) al que responde positivamente (p. 144), entendiéndolo en la forma tradicional, no en la equívoca de Küng, y, siguiendo a Ratzinger, termina dando un juicio muy negativo de la calificación como católicas de las doctrinas de ambos autores. En cuanto a Schoonenberg señala claramente su sabor modernista (p. 81) y sus contradicciones, típicas de la ambigüedad que caracterizó a esa herejía (pp. 96-99), y lo mismo se dice y se repite en cuanto a Küng, en el que las contradicciones son aún de mayor bulto (pp. 191, 220, etc.). El libro, escrito en un estilo muy claro, da mucha luz, aunque a veces las repeticiones de los mismos conceptos cansen un poco al lector. Pero bien merece la pena aceptarlas a trueque de ver claro en un asunto de tanta actualidad, a veces dolo-
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